«CANTE EN LA CALLE» CON LA LÁMPARA MINERA 2016, ANTONIA CONTRERAS

La ofrenda del quejío en femenino ante la ‘Catedral del Cante’

Antonia Contreras sabe proyectar la delicadeza de su cante igual de bien que desgarrarlo cuando es necesario. La cantaora volvía a La Unión, la tierra donde se alzó con la ‘Lámpara Minera’ en 2016 y donde arrasó porque, además del máximo galardón, se llevó los premios por mineras, granaínas y malagueñas. Con todo esto era de entender la emoción de la cantaora: “Los sentimientos afloran cada vez que piso esta tierra”, decía. Aunque Málaga es su tierra natal, Antonia Contreras lleva muchísimos años viviendo en Álora, así que la ‘perota’, como se conoce a los de Álora, no podía estar mejor arropada anoche con una nutrida representación de esta localidad que minutos antes habían recibido el premio el ‘Rojo el Alpargatero’.

Acompañada por el maestro Juan Ramón Caro a la guitarra, la cantaora derrochó todo su arte haciendo lo que mejor sabe hacer: la malagueña que dedicó a su pueblo, Álora y al presidente de la peña flamenca ‘Arriero’ de Viator, Juan Álvarez, que se encontraba entre el público. La cantaora continuó su recital con una guajira y entre palma y palma se levantó de su silla para proyectar todo su torrente de voz, dejando el micrófono a un lado y deleitar a los presentes a capela con las siguientes coplas:

“A honra lo llevo yo,

soy malagueña señores,

a honra lo llevo yo,

allí me parió mi madre,

que es la que quiero yo,

y esa para mí es la que vale”.

Con esa magia en el ambiente y el público rendido a sus pies, Antonia cantó una pieza de su último trabajo ‘Singular femenino’ titulada ‘La Cigarra’ y terminó poniendo el broche de oro a la velada con una deslumbrante versión de ‘Gracias a la vida’ de Mercedes Sosa. Una canción escogida con cariño por Antonia Contreras para agradecer a La Unión y a Álora, que a ella “le han dado tanto”.

Esta web contiene copyright.
Todos los derechos reservados.
Prohibido el uso no autorizado de sus contenidos.

Scroll al inicio